Y finalmente, se acabó el 2020. No cabe la menor duda que todos comulgamos en el hecho que es un alivio muy grande el que los 12 meses transcurridos no volverán a suscitarse; independientemente de los buenos momentos que claramente existieron durante el año, las circunstancias en las que todos vivimos son muy olvidables. A nivel personal la pandemia terminó por complicar una de las que se suponía serían las mejores experiencias de vida que podría tener, pero bueno, lo importante a estas alturas del campeonato es que hay salud.
Por como se han ido suscitando las cosas, tener expectativas de este año parece algo irresponsable y hasta utópico. Sin embargo, lo menos que podemos hacer por nuestra salud mental es generarnos algún tipo de esperanza, aunque sea mínima, del plan de vida que quisiéramos tener para este 2021. Claro, tampoco la idea es sentarme a compartir con ustedes mis ilusiones personales pensando en lo que viene, pero de todas formas sí puedo hacer eco de lo que anhelamos respecto a la pelota.
Fluir entre el apuro
De por sí el fútbol ya estaba teniendo cada temporada una carga de partidos inhumana, ahora con el tiempo perdido por la pausa del covid se ha tenido que hacer un calendario completamente salvaje. Jugar un domingo y luego volver a la cancha un martes... ciertamente los jugadores hoy en día tienen una preparación física muy distinta a la de otrora, pero la carga de encuentros es excesiva si consideramos los torneos domésticos así como los internaciones de clubes y selecciones.
Alegría debería dar esa interminable maratón que nos ofrecen las ligas, pero no podemos dejar de pensar en un detalle no menor: el virus. No llevamos ni la mitad de la campaña y hay demasiados equipos con fechas pendientes por los brotes que hay. A este punto, y con el ritmo de los casos que se dan en las ligas estamos con la posibilidad de que se puedan hasta suspender las competencias nuevamente... y el tema es que pueden llegar a ser por semanas.
Qatar a la vuelta de la esquina
Con la Copa del Mundo a menos de dos años ya (recordemos que se disputará a partir del 21 de noviembre de 2022) solamente las eliminatorias sudamericanas están disputándose. El tiempo está corriendo y las cosas no se ven muy claras respecto a las plazas de las 31 naciones que desfilarán en territorio asiático.
Y de entre todas las eliminatorias, mayor relevancia y expectativa -obviamente- nos genera la CONCACAF... a ver si alguien de una vez por todas nos puede explicar cómo funciona el formato de eliminatorias que tuvo un montón de variantes antes que se 'definiera' de una vez por todas el oficial.
Podríamos pensar en otros sueños que tengo para este año, pero tocará esperar el nivel de desesperación/decepción con el transcurrir de los meses. De todas formas, confío en que lo mejor está por venir para todos.
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